Capitulo 3 Voy a cuidarte

Ambos salen al jardín la luna se encontraba en su punto más alto, iluminando perfectamente la tierra, Bill bebía de una copa, sus ojos se encontraban rojos, claramente se podía ver el parecido extraordinario entre ambos, el progenitor y el primogénito, parecían uno solo.

Bill: ¿acaso has conocido a alguien?

Nicolai solo sonrió mientras metía las manos en los bolsillos y miraba la luna

Bill: ¿Qué vampiresa ha llamado tu atención?

Le preguntaba el padre intrigado a su hijo, en ese momento la sonrisa de Nicolai se borró y miró a su padre…



Capitulo 3

Bill vio la expresión en el rostro de su hijo

Bill: ¿Qué ocurre?
Nicolai: no es nada, es que no se trata de vampiresas
Bill: entonces es…
Nicolai: (lo interrumpe) es música, me llamó la atención un lugar por su música
Bill: ¿música?

Lo miró extrañado como esperando que se tratara de otra cosa

Nicolai: si, es que jamás había visto una interpretación así, con tanta pasión y amor por la música, podía escuchar los latidos del corazón de aquella chica, los cuales cambiaban conforme a las notas de la melodía
Bill: bueno hijo, ahora si que no me esperaba eso, pero me alegro que esta noche te haya gustado
Nicolai: gracias papá, ustedes también se merecen sus ratos solos
Bill: si bueno… (evadiendo tema), ¿saldrás mañana?
Nicolai: si, posiblemente regrese a ese lugar

Bill había notado algo más en su hijo, aunque tenía una apariencia de un joven de 23 años, su experiencia y sabiduría multiplicaban su edad, al igual que su esposa, quien lucia como una joven de 20 o 21 años, sabían más sobre la vida que muchos, la experiencia fue dura adquirirla por los acontecimientos vividos, pero valía la pena transmitirla a su hijo.

A la próxima noche, Nicolai regresó al club, estuvo algunas horas pero la chica no apareció.
Mantenía la copa de vino en su mano, pero esta vez se encontraba desesperado, miraba a las personas, escuchaba las voces y también los pensamientos, pero no podía escuchar la voz de ella, sintió entonces una presencia diferente a las que se encontraban ya en el lugar.
Volteo la mirada y vio a la chica que entraba al lugar, se dirigía sonriente en dirección al dueño, un chico de 20 años el cual la recibía igual con una sonrisa.

Puso atención, y agudizó sus oídos.

Tu: hola Julian
Julian: pero mira que sorpresa, hoy es tu día libre linda ¿Qué haces aquí?
Tu: solo venía a darles algunas partituras a los músicos, tengo nuevas canciones
Julian: esta bien, si quieres yo se las doy
Tu: gracias que amable

Ella le dio algunos papeles al muchacho y después se despidió de él, antes de Cruzar la puerta sintió esa mirada sobre ella, volteó y se encontró con ese par de ojos ambarinos, que la observaban a lo lejos, regresó la mirada al frente y continuó su camino.

Esta ocasión caminaba sola por la calle, al principio del camino algunos autos y luces la acompañaban pero poco a poco se fue quedando sola, miraba para todos lados y estaba atenta a cualquier ruido.

Unos chicos que la vieron pasar, comenzaron a acercarse a ella, (Tu nombre) sintió que le tomaban el brazo, volteo al tiempo que lanzaba un golpe a su “agresor”.

Xxx: tranquila
Tu: esa voz… es de…

Ella observó mejor y pudo distinguir el rostro de aquella persona

Tu: ¿Nicolai?
Nicolai: hola, veo que me recuerdas
Tu: me diste un buen susto, disculpa el golpe
Nicolai: esta bien, lamento haberte asustado, pero… (Miraba a los chicos de reojo) ven, no es seguro que estés aquí sola

Nicolai enganchó su brazo al de ella y comenzó a caminar a su lado, no decía palabra alguna, estaba atento, los chicos los habían seguido, podía escuchar sus pensamientos y los acelerados latidos de sus corazones, cuando se encontraban a poca distancia volteo su mirada a ellos, pero sus ojos se encontraban de un tono azul brilloso, eso no detuvo a los sujetos quienes apresuraron el paso y sujetaron a Nicolai del brazo para después darle un tremendo golpe.

Xxx: ahora si me disculpas tenemos planes para la chica

Uno de los sujetos tomó a (Tu nombre) con fuerza, ella intentó zafarse pero el tipo le dio una bofetada

Nicolai: Solo los cobardes golpean a una mujer
Xxx2: cállate!

Otro de los sujetos intenta golpearlo de nuevo, pero Nicolai detiene el golpe sin dificultad, sus ojos comenzaron a obscurecerse y sus colmillos comenzaron a crecer, tomó al sujeto del brazo y lo lanzó con fuerza, un tercer tipo quiso golpearlo con una barra de metal que llevaba en la mano pero tal fue su sorpresa que al lanzar el golpe, Nicolai se movió con mucha velocidad para embestirlo por detrás.

El tipo que quedaba de pie estaba muy entretenido intentando pasarse de listo con (Tu nombre), ella forcejeaba con él, mientras el tipo la manoseaba como podía, Nicolai se dirigió hacia él y le tomó del brazo.

Nicolai: es tu turno

Lo apartó de (Tu nombre) y le dio un fuerte golpe al muchacho el cual le provocó que comenzara a sangrar, el olor de la sangre comenzaba a dominar a Nicolai, intentaba calmarse, mantenía la cabeza agachada, los chicos se levantaron y se fueron corriendo.

Tu: Nicolai ¿estas bien?
Nicolai: ….
Tu: ¿Nicolai?

Él levantó la cabeza y miró a la chica, sus ojos aún estaban obscuros pero él se encontraba más tranquilo

Nicolai: tu ¿estas bien? (la miró)
Tu: si, gracias a ti… ¿no te hicieron daño?
Nicolai: no, yo estoy bien

Ella lo miró unos segundos y después agachó la mirada, un par de lagrimas cayeron

Nicolai: ¿segura que estas bien?
Tu: si… es solo que… me dio repugnancia la forma en que ese tipo… en que… me tocaba (dijo avergonzada)
Nicolai: tranquila… ese maldito (apretó los dientes), te aseguro que mientras estés a mi lado no voy a dejar que te hagan nada
Tu: gracias, pero apenas nos conocemos, no tienes la obligación de cuidar de mi
Nicolai: lo se, pero… tengo a alguien a quien cuidar, Anabelle es parecida a ti, la cuido con mi vida ya que la amo mucho, ella es como mi hermana, es mi prima pero… siempre hemos estado juntos
Tu: te comprendo muy bien
Nicolai: ven te acompaño a casa

Nicolai escoltó a Iris hasta que llegaron a casa...